Buenos días,

En la reunión de ayer de la red hablamos del problema de los menores conflictivos en nuestros centros ciudadanos. Este es un problema que nos toca de cerca en el Espacio Multifuncional El Tranvía, con menores que escupen al personal, atropeyan personas mayores con bicicletas, rompen puertas y consumen drogas en las puertas del centro, entre otras cosas. Es escalofriante ver como esto pasa en otros centros del municipio con mayor gravedad, como el caso de "la caquita", que roza el surrealismo.

Entre las cosas que se comentaron estaba una que capturó mi mente inmediatamente, se trata de la posibilidad de que nosotros como asociaciones planteemos proyectos de intervención social, en la medida de nuestras posibilidades, para resolver en los distintos barrios la problemática que hace que se den este tipo de casos. Por experiencia, viendo casos así en Santa Cruz, que es donde se encuentra nuestra sede social, este tipo de problemas suelen venir de situciones domésticas complicadas, como familias desestructuradas, violencia de género... o de padres que sienten que carecen de las herramientas y recursos para poder educar a sus hijos y "han perdido el control". Creo que lo primero que habría que hacer es aislar las causas, para luego poder poner en marcha los procesos necesarios para resolverlas, porque cuando uno trabaja en la causa del problema, y la resuelve, hace que ya no se vuelvan a dar las circunstancias necesarias para que se vuelva a producir el problema. Estoy totalmente de acuerdo en que la represión no es el camino, y la razón es muy sencilla: esta solución sólo sirve cuando esta ela policia delante, en cuanto la policia se va el menor de turno vuelve a agredir a alguien. Realmente no soluciona ¿Disuade? Quizás, pero es sólo cuestión de tiempo que lo vuelva a hacer, y si no es en el centro será en la casa del vecino de al lado.

Vengo de una asociación cultural que trabaja temas de cultura y educación, nos dedicamos a darle las personas las herramientas para desarrollarse y contamos con un equipo de unas 150 personas voluntarias de muy diversos campos, entre los que se encuentra la psicología o el trabajo social, entre otros. Pongo a disposición de la red estos recursos humanos, con el fin de proponer un proyecto conjunto que nos permita resolver los problemas que empiezan a verse en nuestros barrios. Es cierto que la sociedad esta cambiando bajo nuestros pies, que lo que el respeto que podría tenerse a un policía cuando éramos pequeños no es el mismo que se le tiene ahora, pero es por eso que las asociaciones debemos también adaptarnos y plantear nuevas soluciones a los problemas sociales que estos nuevos tiempos conllevan, y trabajar los problemas que actualmente vivimos en nuestros barrios. Y en lo que podamos ayudar, nos alegramos de poder ser útiles.

Sin más, desde Asociación Cultural Skadix me pongo a su disposición a la espera de saber que les parece esta propuesta y que colectivos y asociaciones se animan a intentar cambiar el mundo con nosotros.

Un saludo cordial